Por Carmen Gómez y Víctor M. García
México D. F., 9 de febrero (LaSalud.com.mx).- El riesgo cardiometabólico está compuesto por un conjunto de factores que representan el principal problema de salud en la actualidad. Este grupo de factores muchas veces por sí solos no representan ninguna enfermedad, pero en conjunto pueden ocasionar incluso la muerte por enfermedades cardiovasculares, diabetes e hipertensión, según explicó el doctor Simón Barquera, jefe del departamento de Enfermedades Crónicas y Dieta del Instituto Nacional de Salud Pública.
El doctor Barquera informó que la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006 (ENSANUT) arrojó un dato preocupante: más del 60 por ciento de los hombres y más del 80 por ciento de las mujeres mayores de 20 años presentaron obesidad abdominal (circunferencia abdominal mayor de 90 cm en hombres y mayor de 80 cm para las mujeres, según indicadores de la Secretaría de Salud).
Agregó que en México, la tasa de mortalidad por diabetes es de 70 fallecimientos por cada 100 mil habitantes. De hecho, las primeras causas de muerte en nuestro país son la enfermedad cardiovascular y la diabetes tipo 2, respectivamente. Estos problemas de salud, explicó el doctor Barquera, tienen su origen en el estilo de vida mexicano, pero también en un conjunto de factores, entre los que destaca la obesidad, la cual es el principal riesgo.
La obesidad provoca múltiples alteraciones en el organismo, por lo que podría considerarse como el origen de algunas respuestas autoinmunes, altos niveles de insulina, lípidos alterados, diabetes mellitus, hipertensión, osteoporosis, enfermedad cardiovascular y cáncer. Por ello, es necesario que la obesidad y sus efectos reciban un tratamiento adecuado si es que se quiere evitar un incremento en el número de las enfermedades crónicas, finalizó el doctor Barquera.
Para decir que alguien padece el síndrome metabólico, debe cumplir con dos o más de los siguientes criterios: Una circunferencia abdominal mayor de 112 cm en hombres y mayor de 88 cm en mujeres; triglicéridos altos; colesterol HDL (o “bueno”) bajo; tensión arterial por arriba alta, y un nivel elevado de glucosa en ayuno.
Hasta ahora, la obesidad y los factores del riesgo cardiometabólico se habían tratado de manera aislada, sin embargo, la mañana del 7 de febrero Sanofi-Aventis dio a conocer una alternativa terapéutica que permitirá atender de manera global los factores de riesgo, se trata de Acomplia (Rimonabant).
Efectos sobre el sistema endocannabinoide
Durante la presentación, el doctor Rafael Maldonado, del Laboratorio de Neurofarmacología de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, España, explicó que el mecanismo de acción de Acomplia se concentra en un sistema endocrino descubierto hace apenas 20 años: el sistema endocannabinoide.
Este sistema “juega un papel fundamental en el control de la ingesta alimentaria y del metabolismo energético”, pues se encarga de fomentar la ingesta, la acumulación de grasa y controlar el metabolismo tanto de los glúcidos como de los lípidos. La función básica del sistema endocannabinoide es, indicó el doctor Maldonado, “obtener alimento y almacenar energía”.
El sistema endocannabinoide está ubicado en las estructuras involucradas en la ingesta alimentaria: el cerebro y el tracto gastrointestinal, sin embargo, también se localiza en todas las estructuras que controlan el metabolismo y la acumulación de energía, es decir, se localiza a nivel de la grasa visceral, del hígado, el páncreas y el músculo esquelético. El sistema endocannabinoide controla el metabolismo de las grasas, la glucosa, el colesterol y los triglicéridos, afirmó el doctor Maldonado.
Dicho sistema, en condiciones normales, no se mantiene en actividad constante, pues únicamente “se enciende” cuando hay falta de energía (alimento), por lo que su activación continua está directamente relacionada con la obesidad, pues constantemente se está acumulando energía y, con ella, sobreviene un aumento de peso y el desencadenamiento de todas las complicaciones ya mencionadas.
Acomplia reduce la sobreactividad del sistema endocannabinoide, tanto a nivel cerebral (central), como de otros tejidos (periférico), lo que favorece la pérdida de peso y el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 y dislipidemia (alteración en los niveles de lípidos). Al actuar en los niveles central y periférico, Rimonabant logra:
• Mejorar el control glucémico
• Reducir la circunferencia de la cintura y el peso corporal
• Aumentar los niveles de colesterol HDL (“bueno”)
• Reducir los niveles de triglicéridos
En términos técnicos, Acomplia es considerado como el primer bloqueador selectivo de receptores cannabinoides tipo 1(CB1) en su clase. Es un adyuvante de la dieta y el ejercicio o en el esquema terapéutico de pacientes obesos (aquellos con un Índice de Masa Corporal –IMC- mayor o igual a 30 kg/m2), con sobrepeso (con IMC mayor a 27 kg/m2), y que presenten además factores de riesgo asociados como la diabetes tipo 2 y dislipidemia.
Acomplia puede ser usado también como terapia auxiliar a la dieta y el ejercicio para mejorar el control de los niveles de glucosa en pacientes con diabetes tipo 2 con sobrepeso, en combinación con metformina o una sulfonilurea. No está indicado en menores de 18 años ni durante la lactancia o el embarazo.
Nicolas Cartier, director general de Sanofi-Aventis México, aclaró que Acomplia requerirá de receta médica para su venta, pues los fines del medicamento no son estéticos. “Para nosotros, la salud de las personas es lo esencial, por esa razón nos complace presentar Rimonabant (Acomplia), una alternativa más para el bienestar y la calidad de vida de millones de mexicanos”, finalizó.
Atestiguaron el evento el doctor Jesús Ruiz, director médico de Sanofi-Aventis, y el director de Asuntos Corporativos de la farmacéutica, Francisco Mendoza.