Se llevó a cabo el Seminario Institucional “Control y Prevención del Cáncer de Mama en México”, organizado por el Instituto Nacional de Salud Pública
Con el fin de contar con un programa de prevención y control de cáncer de mama en México mucho más eficiente, la Secretaría de Salud pondrá en operación un proyecto piloto de tamizaje en unidades médicas de los 10 estados con mayor incidencia, como Veracruz y estado de México, además del Distrito Federal, que comprende un mayor control de calidad y personal mejor capacitado, anunció la Directora de Cáncer de la Mujer, del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva, Olga Georgina Martínez Montañez.
Al participar en el Seminario Institucional “Control y Prevención del Cáncer de Mama en México”, organizado por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), precisó que el programa piloto tomará en cuenta la concentración de la población, accesibilidad geográfica y otros factores fundamentales, para asegurar que la detección sea accesible a toda la población mexicana y no sólo a quienes viven en las grandes ciudades.
En el Auditorio “Miguel E. Bustamante” de la Secretaría de Salud, aclaró que la equidad es fundamental porque no se puede invertir en las grandes ciudades y favorecer a las que más tienen, sino también beneficiar a las mujeres que viven en lugares marginados y con menor acceso a servicios de salud.
Dio a conocer que la meta para el año 2012 es triplicar el número de mastografías de detección, y para ello se impulsan diversas acciones que van desde la educación para la autoexploración, hasta el acceso médico y a estudios de mastografía de manera oportuna.
Detalló que con el Programa de Cáncer de mama, en los últimos siete años se cuadriplicó la infraestructura, de tal manera que se cuenta con suficiente número de mastógrafos para atender la demanda de detección en las mujeres de 50 a 69 años, que es la población de mayor riesgo.
En el Seminario, la Directora del área de Enfermedades Crónicas del Centro de Investigación en Salud Poblacional del INSP, Gabriela Torres Mejía, señaló que el cáncer de mama es un problema de salud pública al ser la primera causa de muerte por neoplasias malignas en mujeres y tener un comportamiento disperso, ya que ataca a cualquier persona sin importar el nivel socioeconómico.
Añadió que cada año se registran alrededor de cuatro mil 700 defunciones por esta causa y casi 13 mil casos nuevos de dicho padecimiento, de los cuales 70% están en etapas avanzadas. De ahí que como parte de las acciones de prevención del cáncer de mama en México, se haga énfasis en que las mujeres mayores de 40 años acudan a realizarse el estudio de mastografía porque sólo 7% lo hace, sobre todo si tienen antecedentes familiares en línea directa como la madre o la abuela.
Educación, cultura y vías de información hacia la mujer son elementos de suma importancia para que tengan conocimiento de que la mastografía debe realizarse cada uno o dos años, ya que es posible detectar lesiones de tumores mamarios milimétricos y cambiar la vida a una mujer.
Advirtió que para fortalecer el Programa de Detección y Control de cáncer de mama, es necesario incrementar el número de especialistas en radiología, dedicados al estudio de mastografía.
Otros factores de riesgo para el desarrollo de esta enfermedad son el aumento de la edad, obesidad, tabaquismo, uso de terapia hormonal, falta de lactancia materna, menopausia después de los 54 años y menarca antes de los 12.
Finalmente, el Director del Programa de Tamizaje de Cáncer, de la Oficina Nacional de la American Cancer Society, en Atlanta Georgia, Estados Unidos, recomendó a los responsables del Programa de Prevención y Control de Cáncer de Mama en México aprovechar mejor los recursos materiales y humanos disponibles, a fin de ampliar la cobertura y ser más efectivos.
Comentó que siempre será mejor prevenir que detectar el cáncer aunque sea en etapas tempranas, lo cual requiere actividad física, dieta saludable y la lactancia, por ejemplo. Ello repercutirá también en la prevención de otros problemas como diabetes o hipertensión arterial