Se acerca el momento de la
caótica compra de útiles, uniformes, zapatos, equipos de cómputo, entre otras,
para el próximo regreso a clases. Pero lo más importante de este retorno es la
alimentación que los padres proporcionen a sus hijos todo el año, la cual les
proporcionará la salud y vitalidad necesarias de su día a día: juegos, estudios y actividades
extraescolares.
El
Médico Bariatra David Montalvo Castro, Presidente electo del Colegio
Mexicano de Bariatría (CMB), A.C., invita a los padres a alimentar a la familia
sanamente, evitando en lo posible, el exceso en azúcares, dulces, grasas saturadas en carnes,
embutidos y lácteos, bebidas gaseosas y comidas hipercalóricas y sin valor nutricional.
%u201CEl riesgo
de aumentar de peso permanece constantemente al acecho, pues toda vez que una
persona consume más calorías de las que su cuerpo necesita, el excedente de
energía se acumula en forma de grasa. En la temporada vacacional generalmente
se sube más peso por el hecho de que las personas suelen tener menor actividad
física, modificándose los hábitos alimenticios tanto en el tipo de alimentos
como en los horarios, y el patrón de horas de sueño también cambia. Por esas
razones es importante que los padres cuiden la alimentación de los niños%u201D, explica.
Para que no
se incremente el peso por acumulación de grasa debe existir un equilibrio entre
el valor energético de lo que se consume y el que se utiliza por la actividad
física. De lo anterior, el Médico Bariatra recomienda:
- Proporcionar
a los niños refrigerios a partir de frutas y vegetales y no golosinas
industrializadas, por ejemplo, suplir las paletas por fruta licuada con
agua o leche Light, endulzada
con sustituto de azúcar y congelada o por yogurt sin grasa ni azúcar congelado
con una cuchara insertada para que tenga una apariencia similar, pero con
alto valor nutritivo y sin el elevado valor calórico. - Mantener,
dentro de lo posible, el horario habitual de comidas. - Reducir
el consumo de refrescos embotellados, cambiándolos por agua de fruta
natural preparada con agua mineral y, mejor aún, que los padres pongan el
ejemplo en el consumo de agua simple convirtiéndolo en un hábito. - Disminuir
al mínimo el uso de grasa y azúcar en la preparación de los alimentos. - Establecer
un horario para ver televisión y para el uso de videojuegos y computadoras.
Fomentar la lectura es un buen principio. - Rescatar
y enseñar a los niños los juegos de participación activa que usted jugó en
su infancia: avión, bote pateado, cuerda, resorte, encantados, coleadas,
entre otros de esta manera se mantienen
haciendo actividad física.
Consumiendo cosas saludables
Si bien la
alimentación es diferente en cada región, el Dr. Montalvo aconseja consumir las
frutas y verduras propias de la temporada, las cuales proveen de los nutrientes
que el cuerpo necesita en cada época del año.
%u201CEn verano,
por ejemplo, es recomendable el consumo de frutas cítricas que son ricas en
agua y en vitamina C, como la papaya, sandía, pepino, jícama, zanahoria, limón,
que pueden consumirse crudos y no requieren refrigeración. Se puede suplir el
clásico sándwich de jamón y queso por sándwiches vegetarianos con zanahoria y
betabel rallados, germinados de soya y de alfalfa, lechuga, jitomate y aguacate,
y en lugar de refrescos, cantimploras con aguas o jugos naturales%u201D.
Si se vive
en la costa, el médico sugiere consumir una mayor cantidad de zanahoria, papaya
y frutas de color intenso que son ricas en betacarotenos, lo que le dará a la
piel una mayor resistencia a la luz solar, siempre usando bloqueador. La
hidratación, continúa, también es muy importante, por lo que se recomienda
beber no menos de dos litros de agua al día y consumir frutas y vegetales ricos
en agua: naranja, toronja, sandía, melón, papaya, pepino y jícama.
Para evitar
enfermarse en época de lluvia, la aliada en la prevención es la vitamina C, la
cual se encuentra en las naranjas, toronjas, limones, guayabas, fresas y kiwi. %u201CEvite
cambios bruscos de temperatura cuando entre de un sitio muy caluroso a otro con
aire acondicionado a muy baja temperatura. Si se resfría use cubrebocas y no
salude de mano ni de beso a otros para reducir el contagio, recuerde las
recomendaciones que se difundieron cuando la epidemia de la influenza%u201D.
Finalmente
menciona: %u201CComo siempre en el área médica, lo mejor es prevenir. Si se descuidó
o se excedió en las vacaciones, visite a su bariatra de confianza para
controlar los kilos que se acumularon con los anteriormente ganados en las
vacaciones pasadas, y en lugar de tener que perder cinco kilos el problema
ascienda a ocho, 10, 12 o más. No deje que el problema crezca, resuélvalo
cuanto antes%u201D.