México, D. F., 24 de septiembre (Redacción Salud Mundo de Hoy).- Cuando nuestros hijos ingieren sin medida alimentos ricos en grasas y sales, sin darnos cuenta se pueden estar enfrentando a una grave enfermedad, la hipertensión arterial.
La maestra en ciencias Lilia Castillo Martínez, coordinadora de Proyectos de Investigación, del Departamento de Cardiología del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMN), informó que el 27 por ciento de los niños de entre ocho y diez años de edad presentan hipertensión arterial, ello debido al consumo elevado de grasas y sales y a la falta de actividad física.
La investigación realizada por el INCMN a mil 200 niños de las delegaciones Tlalpan, Benito Juárez, Coyoacán y Álvaro Obregón, detectó que de esta población 14.9 por ciento tiene sobrepeso, 18.2 por ciento obesidad y 17 por ciento no realizan ninguna actividad física. Se encontró que el 25% de los menores pasan más de tres horas viendo la televisión o con los videojuegos.
Castillo Martínez explicó que la hipertensión arterial no presenta síntomas durante mucho tiempo y sin tratamiento puede desencadenar complicaciones severas como: infarto al miocardio y hemorragia o trombosis cerebral.
La hipertensión no puede curarse en la mayoría de los casos, pero puede controlarse. La también nutrióloga, enfatizó lo fundamental de tener una dieta rica en frutas y verduras, no abusar del consumo de sal y, sobre todo, hacer ejercicio por lo menos tres veces a la semana durante 30 minutos.
Lilia Castillo recomendó a los padres de familia dar un vaso de leche acompañado de fruta a sus hijos antes de llevarlos a la escuela, así como incluir en la dieta el consumo de pescado una vez por semana. Además, delimitar el consumo de grasas saturadas de productos de origen animal.