El diez por ciento de la población masculina, de entre 35 y 40 años de edad, registra la mayor incidencia de ácido úrico elevado, que asociado con síndrome metabólico (obesidad y diabetes), la ubica con mayor riesgo para desarrollar gota, padecimientos del corazón y del riñón, advirtieron especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El ácido úrico es un componente normal del organismo; se produce por la destrucción de células y se desecha por el riñón. Cuando su nivel en una persona supera los siete miligramos por decilitro de sangre, causa la enfermedad conocida como gota, un dolor muy intenso en las articulaciones, especialmente de los pies o las rodillas.
El doctor Fernando Laredo Sánchez, del Servicio de Medicina Interna del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional (CMN) Siglo XXI, explicó que el ácido úrico se genera en todo el organismo, puede subir y mantenerse alto sin dar ningún síntoma, aunque puede ser el inicio de problemas en el corazón y en los riñones.
Este desequilibrio está relacionado con diabetes, obesidad, sobrepeso, alimentación desequilibrada y excesivo consumo de alcohol, carne roja y mariscos, ricos en purinas (componentes de ciertos alimentos que se convierten en ácido úrico en el cuerpo) que ocasionan el desarrollo de gota.
El especialista del Seguro Social señaló que esta enfermedad se manifiesta con inflamación, dolor muy intenso en el dedo gordo del pie, tobillo o rodillas, por lo cual el paciente demanda atención médica urgente, ya que dicho cuadro es factor de discapacidad temporal porque impide el desarrollo de cualquier actividad.
Cuando un derechohabiente presenta cuadro agudo o recurrente de gota, la valoración del médico familiar lo deriva con los especialistas endocrinólogos y reumatólogos, precisó Laredo Sánchez.
La crisis de gota no pone en peligro la vida de la persona, pero sí puede complicar la salud si tiene obesidad y/o diabetes, ya que esta condición predispone a desarrollar enfermedades del corazón, como angina de pecho o infartos.
El internista del IMSS exhortó llevar un estilo de vida saludable, con alimentación variada y la práctica cotidiana de ejercicio, que permita mejorar la calidad de vida para el paciente con diagnóstico de gota, quien debe evitar carne roja, alcohol y quesos añejos, por su propio beneficio.
Para prevenir estos padecimientos, en el IMSS se recomienda que los hombres se mantengan en el peso ideal, según su edad y talla, procurar una alimentación balanceada y hacer ejercicio por lo menos 30 minutos al día, para evitar que los cristales de ácido úrico se depositen en las articulaciones. Además recomendó acudir regularmente a valoración médica a las Unidades de Medicina Familiar.
La gota es una enfermedad predominante en el hombre; en la mujer puede observarse de forma rara y siempre durante la menopausia.