La nutrición es un aspecto muy importante de nuestra salud, por ello se ha creado el plato del bien comer: un esquema explicativo con los principios dietéticos básicos que requiere la población para una buena alimentación, teniendo en cuenta sus costumbres y necesidades.
Los hábitos alimenticios que prevalecen hoy día en nuestro país no son los más adecuados para mantener la salud, y esto ha ocasionado el surgimiento de contrastantes problemas que diversas estadísticas se han encargado de evidenciar.
Por un lado se sigue observando importante índice de desnutrición que reduce las capacidades físicas e intelectuales de muchos mexicanos y, por otro, cada vez es más notable el creciente porcentaje de sobrepeso y obesidad, lo cual favorece el avance de padecimientos como infartos (interrupción en el suministro de sangre en cerebro o corazón) y diabetes (elevado nivel de azúcar en sangre).
A raíz de esto, un grupo de profesionales de la salud y expertos en nutrición trabajaron durante varios años para definir un esquema alimenticio que cumpliera con dos objetivos: que fuera fácil de comprender y que tomara en cuenta las particularidades y requerimientos de la población mexicana.
Así surgió el Plato del bien comer, un gráfico que se empezó a utilizar desde hace algunos años y cuyo uso se volvió reglamentario a partir de enero de 2006, ya que apareció como parte de una norma oficial (NOM-043-SSA2-2005, publicada en el Diario Oficial de la Federación) que especifica distintos aspectos para orientar a nuestra población en materia de nutrición.
¿En que nos beneficia?
Esta herramienta tiene como fin brindar orientación y ofrecer opciones prácticas para integrar una dieta correcta, adecuada a cada cultura, a las costumbres, las necesidades y posibilidades de cada individuo, para aprender a balancear sus alimentos de una manera práctica y sencilla.
– Es una muestra gráfica de las porciones que deben existir en cada comida.
– Nos proporciona una fácil identificación de los grupos de alimentos para la creación de menús saludables.
– Y ninguno de los grupos se privilegia sobre otro.
Clasifica a los alimentos en tres grupos
Verduras y frutas: aportan vitaminas, minerales y fibra, así como color y textura a la dieta. Como ejemplo de este grupo tenemos la naranja, el plátano, la papaya, el brócoli, las zanahorias y la calabaza, entre otros.
Recuerda que es importante incluir en la dieta diaria cinco porciones de verduras o frutas al día, de preferencia crudas y de la estación.
Cereales: es la principal fuente de la energía que el organismo utiliza para realizar sus actividades diarias por lo que su consumo es fundamental para el buen funcionamiento orgánico. Este grupo incluye el maíz, arroz, trigo y avena. Es preferible consumir los cereales integrales por su aporte en fibra.
Leguminosas y los alimentos de origen animal: es el grupo que aporta proteínas.
Entre las leguminosas encontraras: frijoles, lentejas y habas. Su consumo es recomendable de una a dos veces por semana.
Los alimentos de origen animal aportan también grasa saturada (colesterol), por lo que su consumo deberá limitarse a una cuarta parte de tu plato.
Una dieta correcta, junto con la actividad física, son los pilares fundamentales que nos permiten mantener una buena salud.