La obesidad y el sobrepeso son un problema real que enfrenta México e incluso ha tomado magnitudes extraordinarias, por lo que se debe actuar en una de las medidas más redituables como es la prevención y promoción de la salud, aseguró el Secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos al inaugurar el primer Foro Regional de Salud Alimentaria: Estrategia contra el Sobrepeso y la Obesidad.
Indicó que la obesidad se ha triplicado en los últimos 20 años, principalmente en la población infantil, y se empiezan a ver niños con diabetes tipo II desde los 10 años de edad, y no sólo ocasiona diabetes, sino cáncer de colon, mama, matriz o útero, todas ellas enfermedades que disminuyen la esperanza y calidad de vida.
Precisó que si bien en México se ha avanzado en el incremento de la esperanza de vida, la amenaza de las enfermedades crónicas, en ocasiones consecuencia del sobrepeso y obesidad, puede hacer que los niños vivan menos que sus padres.
Dio a conocer que en México hay cuatro millones y medio de niños, 42 millones de adultos y seis millones de adolescentes con sobrepeso u obesidad, resultado del cambio en los estilos de vida, ya que por ejemplo menos de 15 por ciento de mujeres y de 25 por ciento de hombres mayores de 25 años hacen ejercicio físico continuo.
Comentó que si un individuo aumentó entre cuatro y seis kilos en los últimos 10 años, tiene el doble de riesgo de diabetes y si incrementó más de 10 kilos, la posibilidad se multiplica por cuatro.
Añadió que las enfermedades crónico degenerativas son la primera causa de consulta, sus costos directos ascienden a más de 43 mil millones de pesos anuales y los indirectos a 25 mil millones. En 2017 será el doble.
Señaló que el problema del sobrepeso y la obesidad no es sólo del gobierno, los ciudadanos o de la industria, sino es global, pero para enfrentarlo se requiere primero tener conciencia de su existencia y fomentar la actividad física continua, porque no debe ser una práctica ocasional, sino permanente.
También se requiere que haya disponibilidad de agua potable en las escuelas, disminuir el consumo de azúcar y grasa, revertir el descenso de más de 35% en el consumo de frutas y verduras, un etiquetado claro de alimentos elaborados para que la población sepa y entienda lo que está consumiendo.
Además, seguir impulsando la lactancia materna durante los primeros seis meses y reducir el consumo de sal, ya que tiene un impacto directo en los problemas cardiovasculares.
En su oportunidad, el secretario estatal de Salud, Luis Felipe Graham Zapata, informó que siete de cada 10 adultos y tres de cada 10 niños padecen este problema de salud pública que pone en riesgo su futuro.
Ante esa situación, puntualizó, se debe emprender acciones multifactoriales que garanticen la disponibilidad, acceso y consumo de alimentos saludables, oportunidades de actividad física en la escuela, un buen sistema de agua potable, el compromiso de los padres de familia y el ejemplo del personal de salud.
%u201CPorque de nada sirve que se den todas las condiciones para que los menores bajen de peso, si los padres de familia no asumen su compromiso y contribuyen comprándoles juegos que los mantienen inactivos%u201D, finalizó.
Asistieron los secretarios de Salud de la región sur-sureste: Chiapas, Quintana Roo, Puebla, Veracruz y Campeche, así como el secretario técnico del Consejo Nacional de Salud, Jorge Sánchez, además de representantes de Yucatán, Guerrero, del ISSSTE, IMSS, Educación, DIF y autoridades de distintos municipios.
Este es el primero de los cuatro foros regionales que se desarrollarán para analizar la posición de los ciudadanos, académicos, encargados, especialistas en salud, así como la industria alimentaria para seguir avanzando en la Estrategia Nacional contra el Sobrepeso y Obesidad que arrancó el pasado 25 de enero.