Expertos del Hospital Infantil de México “Federico Gómez” comprobaron que los niños con bajo peso al nacer tienen más probabilidades de desarrollar diabetes tipo II o enfermedades cardiovasculares, en comparación con los nacidos con peso normal.
Al termino del estudio los investigadores observaron que los niños de término que habían nacido con peso menor o igual a dos mil 500 gramos sufren problemas asociados como mayores índices de resistencia a la insulina y aumento de la presión arterial.
El bajo peso al nacer en población mexicana es un factor de riesgo para desarrollar diabetes tipo II al ser identificado se podrá incidir en los cuidados y la vigilancia de las normas que están en etapa de gestación de la madre, destacó la doctora Patricia Guadalupe Medina Bravo, titular de la investigación.
Destacó que la desnutrición del feto puede ser por la falta de nutrientes y oxígeno que no llegan de manera suficiente a la placenta y en este caso el bebé usa sus reservas para que los órganos vitales como el cerebro o el corazón se puedan desarrollar, lo que hace que disminuyan su peso y talla.
Sin embargo, ciertos órganos como el hígado, músculos y tejido graso sufren una “programación adversa”, lo cual condiciona alteraciones en el metabolismo de estos individuos desde etapas tempranas de la vida. Esta hipótesis ya había sido propuesta en otras poblaciones, aunque no se habían llevado a cabo estudios en población mexicana.
Para llevar a cabo la investigación se reclutaron a 85 niños con obesidad entre seis y diez años de edad con antecedentes de bajo peso al nacer.
A este grupo de individuos se les realizo un estudio sanguíneo para valorar sus niveles de glucosa, colesterol, triglicéridos y resistencia a la insulina; además de medir su peso, talla, circunferencia de cintura y calcular su índice de masa corporal.
Los resultados obtenidos fueron que este grupo de infantes mostraron un incremento en las concentraciones de glucosa, además de resistencia a la insulina, valores mayores de presión arterial y mayor cantidad de grasa a nivel abdominal.
De acuerdo con los investigadores del estudio este hallazgo sugiere que, con el tiempo, estas personas pueden ser más vulnerables a trastornos como la diabetes tipo II y las enfermedades cardiovasculares.
Medina Bravo mencionó que dentro de los factores de riesgo de la madre que pueden contribuir a un bajo peso al nacer son haber tenido embarazos múltiples, una mala nutrición, padecer alguna enfermedad cardiaca o hipertensión, el consumo de tabaco, alcohol o drogas, padecer diabetes o cursar con infecciones durante el embarazo.
Los resultados de este estudio serán aprovechados para documentar que el peso de un individuo al nacer no es un dato anecdótico sino un factor a tener en cuenta en lo referente a la evolución de la persona a lo largo de toda su vida, ya que es un factor clave que puede modificar la capacidad de sus tejidos para metabolizar la insulina y llevar a un mayor riesgo de alteraciones de la glucosa en sangre.