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Se terminan los lineamientos contra el sobrepeso y obesidad, para todas las escuelas públicas del país
Si un niño mayor de cinco años es obeso, está en riesgo de que durante 20 o 30 años sufra algún padecimiento crónico como diabetes, por ello, se debe pensar en el futuro desde la niñez cambiando los estilos de vida, afirmó el Secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos.
Al encabezar la presentación sobre la investigación formativa de la Estrategia %u201C5 Pasos para la Salud%u201D, dirigida al personal de la Universidad Iberoamericana, el Secretario de Salud informó que se modificaron los desayunos escolares, a fin de que los niños vuelvan a tener el gusto por los alimentos sanos, y se terminan los lineamientos contra el sobrepeso y obesidad que serán obligatorios para todas las escuelas públicas del país.
Con estos lineamientos, detalló, se enseñará el tema de la nutrición como parte de la currícula y sólo los alimentos sanos que se promuevan serán los que expendan en las escuelas.
Subrayó que si bien la esperanza de vida ha aumentado, los últimos años pueden ser de sufrimiento porque la persona depende de una máquina de diálisis, tiene una amputación, invidente u otra discapacidad, como consecuencia de las enfermedades crónicas.
Puntualizó que en los últimos 20 años se triplicaron el sobrepeso y la obesidad de forma casi imperceptible debido al cambio en los estilos de vida, influenciados por otros países, y al ritmo de vida de la población.
Dijo que desde el pasado 25 de enero opera El Acuerdo Nacional para la Salud Alimentaria, con la colaboración de los tres niveles de gobierno y los poderes Legislativo y Ejecutivo. Sin embargo, resultarían falaces si no tienen el apoyo de la ciencia que se desarrolla en las universidades, la cual es el soporte de las acciones.
Comentó que la industria de alimentos también ha mostrado su compromiso con la salud de la población, con la producción de una amplia variedad de productos de bajo contenido calórico, así como la disminución de la publicidad dirigida a niños.
La campaña contra el sobrepeso y la obesidad en la Universidad Iberoamericana se lleva a cabo en tres modalidades: una dirigida específicamente para los trabajadores de intendencia y administrativos, otra para alumnos y una tercera para profesores.
El objetivo es buscar el incremento en el consumo de agua natural y la disminución de refrescos y café, así como la práctica de actividad física, que está ausente en esos tres grupos de población.
De esta manera, la Universidad Iberoamericana se adhiere al Acuerdo Nacional para la Salud Alimentaria. Estrategia contra el Sobrepeso y Obesidad, que arrancó el pasado 25 de enero.
En la presentación también estuvieron el asesor en Trastornos de la Conducta Alimentaria de la Secretaría de Salud, Armando Barriguete Meléndez; el rector de la Universidad Iberoamericana, José Morales Orozco; la directora del Departamento de Salud de este centro educativo, Ana Bertha Pérez Lizaur, y la presidenta de la Asociación de Egresados de la licenciatura en Nutrición y Alimentos, Esther Nissan Schoenfeld.
