El desayuno debe ser un alimento
equilibrado, contener lácteos, pan, cereales y frutas variadas para
proporcionar al organismo los nutrientes
necesarios que darán energía para realizar las actividades cotidianas y
mantener un estado de salud adecuado.
El Instituto Mexicano del Seguro
Social (IMSS), Delegación Estado de México Poniente, a través de la
Coordinación de Nutrición y Dietética indica que es importante que la primera
comida que se haga en el día sea variada, puesto que el organismo al momento de
dormir entra en una fase de ayuno, por lo que es importante al despertar por la
mañana, ingerir alimentos.
El desayuno constituye el alimento más
importante del día, ya que nuestro cerebro utiliza glucosa, misma que se
obtiene en una mayor cantidad durante la ingesta de los alimentos de la mañana,
ya que después de un ayuno largo las cantidades de dicha substancia disminuyen,
por lo que al no recibir nuevamente la cantidad necesaria se remplaza por energía
reservada en las grasas.
Es fundamental fomentar este hábito a
lo largo de las etapas de la vida, en especial durante la infancia, pues los
niños están en constante aprendizaje y con el simple hecho de consumir
alimentos variados y balanceados por la mañana podrán contar con la energía
suficiente para maximizar su capacidad de concentración, además de que su
rendimiento físico será el adecuado.
Es importante destacar que el desayuno trae
consigo beneficios físicos y
psicológicos; como evitar padecimientos del corazón y estómago, como úlceras o
colitis, contribuye a un menor consumo de grasas estabilizando los niveles de
colesterol en la sangre, además de propiciar una sensación de bienestar y
plenitud.