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La presión arterial (PA) es considerablemente más baja en los niños que en los adultos, pero se incrementa de forma gradual a lo largo de las dos primeras décadas de la vida, llegando hacia el final de la adolescencia a alcanzar los valores de la adultez, alertó el Doctor Víctor Alejandro Quiroz Martínez, cardiólogo clínico en el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”.
“Muchos niños y adolescentes actualmente son identificados con importantes factores de riesgo genético o metabólico para una futura presión arterial elevada, lo que hace necesario un diagnóstico oportuno por el médico a temprana edad para aplicar medidas cuando el niño-adolescente todavía es normotenso, y de esta manera prevenir la aparición de la HAS o de acuerdo con cada caso, tratar de retardar y controlar el aumento de la presión arterial”, expuso.
En entrevista, el miembro de la Sociedad Mexicana de Cardiología, explicó que existen numerosos factores de riesgo para desarrollar dichas manifestaciones, entre los que se incluyen al sobrepeso, obesidad, resistencia a la insulina, parámetros inflamatorios elevados, poca actividad física o bajo nivel de condición física, aunque también existen factores no modificables tales como la edad, el sexo o los condicionantes genéticos.
“Lo más simple: no fumar, consumir poca sal y azúcar, hacer ejercicio y no beber alcohol. Estas medidas no tienen costo y desde mi punto de vista son altamente eficientes”, comenta el doctor Quiroz respecto de las recomendaciones para evitar un evento cardiovascular, y agregó que “cuando se sospecha o se corrobora una enfermedad cardiovascular, es imperativo seguir las indicaciones del médico”.
Incluso el especialista recordó que la HAS es causa de graves complicaciones como incapacidad y/o invalidez. “A nivel mundial, en el año 2000, el 26.4% de la población adulta tenia hipertensión, y se prevé que para el año 2025, el 29.7% de la población padecerá esta enfermedad crónica”
Y agregó que de acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012 (ENSANUT), la prevalencia de HAS en nuestro país es del 33.3% en los hombres y de 30.8% en la mujeres. El total de personas hipertensas mexicanas es de 22.4 millones, pero solo el 36.6% de estos pacientes diagnosticados se encuentran bajo tratamiento médico y tan solo el 25.4% de los pacientes que tienen tratamiento se encuentran controlados.
Finalmente, el Doctor Quiroz Martínez agregó que “por ello es fundamental que a pesar de que las manifestaciones clínicas de la HAS aparecen en la edad adulta, desde la adolescencia puede existir un registro de perfil para cada individuo y que a partir de entonces se individualice la frecuencia en que se deben llevar a cabo los chequeos”.
